C E N T R O D E D E R E C H O S H U M A N O S T E P E Y A C

D E L I S T MO D E T E H U A N T E P E C, A. C.

DIÓCESIS DE TEHUANTEPEC

Apartado Postal 68 C. P. 70760 Tehuantepec, Oaxaca

Tel / Fax: (971) 715 14 42 correo electrónico: cdhtepeyac@prodigy.com.mx

 

ALLANAMIENTO AL CENTRO DE EDUCACIÓN CAMPESINA.

 

UCIRI, (Unión de Comunidades Indígenas de la Región del Istmo) es una organización de pequeños productores de café, maíz, fríjol, verduras y frutales, formada por indígenas zapotecas, de la Sierra Mixes. Con permiso de exportación de café y otros productos.

El CEC. El Centro de Educación Campesina, ubicada en San José el Paraíso, Tehuantepec, Oaxaca, forma parte de UCIRI, pues es un lugar donde día con día se capacitan los hijos de los campesinos en las técnicas agrícolas orgánicas que les ayudan a mejorar sus parcelas donde siembran su café, maíz, fríjol y hortalizas.

En abril de 1995, las instalaciones del CEC, fueron allanadas e investigadas por un contingente de militares, a lo que los representantes de la comunidad solicitaron las razones para realizar estas violaciones, no obteniendo respuesta por las autoridades responsables.

El 24 de Marzo de 1996, siendo las 9:00 de la mañana, nuevamente fueron allanadas las instalaciones del CEC, pero ahora también fue cercada la Comunidad de San José el Paraíso, por un grupo de militares, que empezaron a rodear y a introducirse a la Escuela, desplegando y tomando actitudes de combate e intimidando a los alumnos y maestros que laboran en el Centro. Cuando las autoridades de la Comunidad cuestionaron el por qué de este hostigamiento, respondieron que recibieron informes que en el CEC y en la Comunidad de San José el Paraíso se adiestra política y militarmente a grupos guerrilleros.

El 6 de septiembre 1996, de nueva cuenta hubo una entrada de militares al plantel del CEC, con el pretexto de realizar investigaciones sobre la supuesta existencia de armas y un campo de adiestramiento guerrillero. Cercando nuevamente las entradas a la Comunidad de San José el Paraíso. Realizando preguntas sobre de donde provenía el financiamiento del CEC y de UCIRI (Unión de Comunidades Indígenas de la Región del Istmo), ejerciendo presión sobre los alumnos y maestros para obtener sus respuestas.

 

 

Diciendo que a través del sistema de radiocomunicación los Coordinadores del CEC, fueron avisados de la llegada de los Militares, lo que dio tiempo para esconder las armas y las evidencias.

De igual manera, hicieron investigaciones con respecto a la presencia de un grupo de misioneros de procedencia española que estaban de visita en el CEC, ya que según los militares todos ellos tienen relación con ETA, grupo de terroristas del norte de España, Tierra de los Vascos, llamada Euskadi.

También, cuestionaron la relación existente entre la iglesia católica, el CEC y UCIRI.

A pesar, de todo el hostigamiento de que fueron victimas por parte de las Brigadas de Militares, los integrantes del CEC y miembros de UCIRI realizaron una denuncia, ante el Lic. Diodoró Carrasco Altamirano, gobernador del Estado de Oaxaca en ese entonces, para manifestarle la preocupación que existe entre los alumnos y maestros del CEC, ya que los militares no los dejan realizar pacíficamente su trabajo, hostigándolos con preguntas e investigaciones sobre supuestas armas y sobre un supuesto campo guerrillero, que nunca han encontrado ni encontraran pues el CEC-UCIRI, es únicamente una escuela dedicada a la capacitación de los campesinos en las técnicas orgánicas del Café.

Todas esta serie de hostigamientos fueron denunciados, por el Centro de Derechos Humanos Tepeyac a través de acciones urgentes, solicitándole a los organismos nacionales e internacionales interceder ante el gobierno del Estado y Federal, a fin de restituir la armonía y la paz de San José el Paraíso. Exigiendo de las autoridades correspondientes prontas soluciones a la impunidad de que son víctimas los integrantes del Centro de Educación Campesina (CEC).

De igual forma las autoridades de San José el Paraíso, presentaron escrito de queja, ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, a fin de deslindar responsabilidades por el Allanamiento y Hostigamiento de que fueron víctimas los integrantes del CEC. A lo que la CNDH, después de solicitar informe al Lic. General Brigadier de Justicia Militar Marcial Rafael Macedo de la Concha. La CNDH respondió a las autoridades quejosas: "No se encontraron evidencias que pudieran acreditar violaciones a los derechos humanos, ya que el comandante (o sea el responsable del allanamiento) exhortó a los agraviados para que presentaran denuncia en contra del personal militar que les hubiera ocasionado un agravio, a lo cual dichas personas no formularon acusación alguna."

En consecuencia la CNDH, sugirió a las autoridades de San José el Paraíso presentaran su denuncia ante el Agente del M. P. Militar.

Quedando claro, que la CNDH, solo ha estado tomando como fundamental la información proporcionado por SEDENA, sin tomar en cuenta a los quejosos. Ni procedió como debe ser, pues al recibir el informe de SEDENA, debió enviar copia al quejoso y darle oportunidad de aportar pruebas. Tomando a la SEDENA como juez y parte, como si fuera la autoridad competente para pronunciarse sobre la verdad de los hechos, cuando SEDENA es la autoridad señalada como violadora de los DERECHOS HUMANOS. Siendo absurdo que espere que los quejosos presenten denuncia ante el Ejército en contra de los elementos del mismo Ejército.

Parece que la CNDH ni la SEDENA, comprenden que los derechos humanos abarcan más que las garantías individuales, aunque estas también fueron violadas (v. gr. el libre tránsito), incluyen también los Derechos Comunitarios (v. gr. toda la comunidad fue privada de su libertad pues fue cercada), y los Derechos Indígenas (v. gr. el derecho de organizarse, sin que se les moleste, además el Ejército entró sin respetar las autoridades tradicionales y sin respetar la capacidad de la comunidad de resolver sus propios problemas).

San Cristóbal de las Casas, Chiapas

7 mayo 2003