PAZ Y MILITARIZACION
Adolfo Pérez Esquivel

Compañeras y compañeros:

Es una alegría participar con ustedes en estos momentos tan difíciles para el mundo y para América Latina. He tratado de escuchar, de comprender esta gran diversidad de organizaciones, de propuestas, de alternativas. Todos estamos tratando de encontrar caminos comunes; de la diversidad, de la unidad. Venimos de distintas experiencias, y distintos recorridos de nuestros pueblos. Sin embargo vemos denominadores comunes que nos identifican, que nos generan nuevos espacios y un gran desafío que tenemos que enfrentar. Nuevas sociedades. Eso que en el Foro Social Mundial, en Porto Alegre, decimos, y que aquí se ha señalado, otro mundo es posible, otra América Latina es posible.

Me pidieron en este sentido hablar de Paz y Militarización. Aquí se han desarrollado muchas propuestas. Pero antes quisiera recordar dos cosas: primero, aquí hay una ausencia y también una presencia muy fuerte de un amigo de caminar en América Latina, de alguien que ha aportado durante muchísimos años, fundamentalmente en Chiapas, un camino de resistencia, de luz, de esperanza, y me refiero a Don Samuel Ruiz.

No podía dejar de señalarlo, esperaba encontrarme con él. Porque creo que ha aportado muchísimo a todos los pueblos. Desde la espiritualidad, desde el compromiso, y para mí es una gran alegría volver aquí a Chiapas y encontrarme con todos aquellos que han compartido ese caminar.

Estamos en una situación sumamente crítica en el mundo. Conflictos, guerras. ¿Saben que hay más de 50 guerras en el mundo? Muchas de estas guerras silenciosas. Y hay una guerra silenciosa de la que muy pocas veces se habla. El mismo día de los atentados a las Torres Gemelas en Nueva York hubo otra información de otro atentado que los medios de comunicación no lo tomaron. Naciones Unidas no se reunió, el Consejo de Seguridad lo ignoró, pero simultáneamente con el tremendo atentado a las Torres gemelas la FAO señaló que ese día en el mundo murieron más de 35,000 niños de hambre. Nadie dijo una palabra sobre eso. A eso yo le llamo la bomba silenciosa del hambre que mata más que las guerras. Ese genocidio silencioso contra la vida de nuestros pueblos.

¡Que tremendo esto que está viviendo la humanidad!

Quiero hacerles una pregunta: ¿A ustedes les gustan los cuentos?

Creo que muchas veces un breve cuento ayuda a la reflexión más que muchas disquisiciones mentales. El cuento no es mío. Es de un amigo del caminar en América Latina: Gabo García Marquéz.

Porque, todo esto que estamos haciendo ¿hacía dónde va? ¿Qué es lo que queremos conseguir con todo esto? Hablamos de la desmilitarización, de la economía, de la deuda externa, del ALCA... ¡Cuantas cosas, cuantas preocupaciones tenemos!

Pero creo que este cuento nos puede clarificar muchas cosas.

El cuento es así. Un niño de seis años. El padre es un científico que está en su gabinete investigando para ver si puede resolver algunos problemas de la humanidad. Y el niño entra, molesta a su padre y le dice: Papá, quiero ayudarte. Su padre dice: No, hijo. Estoy muy ocupado, estoy investigando y necesito el tiempo para trabajar.

Y el niño dice: Pero, yo vengo a ayudarte. Y el padre no sabe qué hacer. No sabe que hacer, ¿cómo entretener a su hijo? Y encuentra una revista y en la revista ve el mapa del mundo. Toma una tijera, corta la hoja y comienza a cortar en muchos, muchos pedazos el mapa del mundo. Y entonces le da una cinta al hijo y le dice: Hijo, siéntate aquí y trata de arreglar el mundo. Y el niño no conocía el mundo. ¿Cómo arreglar el mundo? Y el padre, mientras volvía a su trabajo, dice: Bueno, con esto, a mi hijo, lo tengo entretenido 10 días.

Pero a las dos horas el niño le dice: Papá, ya terminé, ya arreglé el mundo. Y el padre dice: No puede ser, si mi hijo no conoce el mundo. Y fue a ver lo que había hecho el niño.

Efectivamente, había arreglado el mundo. Y le dice: ¿Cómo hiciste si no conoces el mundo?

- Papá, cuando cortaste la hoja vi que del otro lado había un hombre. Y como conozco al hombre, di vuelta a todos los papelitos y primero arreglé al hombre. Cuando le di vuelta, había arreglado al mundo-.

Si nosotros no tenemos la capacidad de tener presente a ese hombre, esa mujer, ese niño, ese anciano que nos cuestiona, que nos interpela y que reclama un lugar en la vida, todo lo que hacemos no sirve. Ese es el eje. Ese es nuestro objetivo, el ser humano, la persona humana, la vida de nuestros pueblos, la identidad de nuestros pueblos. A partir de eso podemos construir, a partir de eso podemos recrear la vida y podemos construir sociedades más justas y más humanas para todos.

Yo he tomado también para esta reflexión, como un aporte, el pensamiento de otro gran amigo que es un escritor uruguayo, Eduardo Galeano, y que tiene que ver con dos ejes que voy a tratar de desarrollar, esto que nos imponen del pensamiento único de que no hay salida.

El pensamiento único nos lleva a la muerte de las identidades, de los valores, de la conciencia de los pueblos. Nos lleva a la muerte de la memoria; no hay pueblo sin memoria. Y nosotros en la resistencia tenemos que generar, que potenciar el pensamiento propio. Y muchas veces cuando se olvida esta identidad del pensamiento propio, la memoria, caemos en esta dominación del pensamiento único.

La dominación no comienza por lo económico. La dominación comienza por lo cultural. Si nos dominan culturalmente estamos perdidos. Y quería este pequeño pensamiento de Eduardo Galeano... que en esa fina ironía que tiene en el pensamiento, nos dice: En un mundo sin alma se nos obliga a aceptar como único posible que no hay pueblos, sino mercados; no hay ciudadanos, sino consumidores; no hay ciudades, sino aglomeraciones; no hay relaciones humanas, sino competencias mercantiles.

Estamos frente al pensamiento dominante de los valores filosóficos, espirituales y éticos. Hay un quiebre del pensamiento impuesto a través de este pensamiento único. Las cosas no ocurren porque sí. Hay un dirigismo, hay una situación que hoy se esta imponiendo en el mundo. No hablamos más de integración, hablamos de la globalización, de este sistema de dominación, y muchas veces nosotros terminamos utilizando el mismo lenguaje de los dominadores. Tenemos que liberar el pensamiento liberando la palabra para poder ser nosotros mismos y no tener el pensamiento ajeno, sino el pensamiento propio, a partir de las identidades y la vida de nuestros pueblos. A través de esto podemos construir nuevas posibilidades.

Y hoy, con la militarización, el ALCA, la deuda, estamos frente a esta hegemonía mundial del pensamiento único. ¿Qué hacer frente a esto?

Todos sabemos, y lo venimos discutiendo estos días, que este proyecto de la hegemonía mundial nos esta asfixiando. Vienen por más, por nuestros recursos, por el agua, por el petróleo, pero también por la dominación cultural. La militarización no viene sola. Pero, ¿qué es la militarización? Creo que tenemos que analizar esto.

No es solo plantear que se vayan las bases militares norteamericanas. Si Estados Unidos tiene bases militares en América Latina es porque hay gobiernos latinoamericanos cómplices. Ese es el gran problema. Nadie se mete en la casa de uno, a no ser que sean asaltantes; pero aquí esta complicidad les ha abierto las puertas de los parlamentos y de los gobernantes. Y yo creo que esto hay que analizarlo en profundidad.

Hay sociedades militarizadas, pero no solo a través de las fuerzas armadas. Hay una militarización también policial. Las fuerzas policiales están militarizadas. Y muchas veces con el pretexto de la seguridad se condena la libertad, se deja la libertad, se pierde la libertad. Y nos hablan siempre de la seguridad. ¿Qué es la seguridad? ¿Cuál es el rol que deben cumplir las fuerzas armadas en nuestros países?

Las fuerzas armadas , nacieron de los procesos de liberación de nuestros pueblos. En el tiempo este eje se cambió. De fuerzas de liberación se transformaron en tropas de ocupación de nuestros propios pueblos. Las dictaduras militares en América Latina ¿cómo se impusieron?

Más de 80,000 militares latinoamericanos fueron formados en las Escuelas de Las Américas en Panamá y en las academias militares de Estados Unidos para imponer el terror y la dominación en nuestros pueblos. Toda la década del sesenta, del setenta, fue marcada por las dictaduras militares en América Latina. Esto no vino solo, porque también a través de las mismas se impuso la deuda externa, que es un mecanismo de dominación continental. Después vinieron las privatizaciones, las políticas de ajuste y capitalización. Y para eso las fuerzas armadas fueron el instrumento, con un alto costo en vidas humanas.

Tenemos que clarificar lo que es la militarización y el rol de las fuerzas armadas en nuestros países, que deben servir a la soberanía del pueblo, y no terminar siendo tropa de ocupación de nuestros propios pueblos, como decía. Los partidos políticos no tratan los problemas de las hipótesis del conflicto que tienen las fuerzas armadas.

Vamos a ver algunos de estos elementos.

¿Qué pasa con las bases militares norteamericanas en el continente, cuál es el objetivo? No están aquí para los desfiles. Hay un proyecto muy claro de dominación. Y que viene de la época de las dictaduras militares que se continúa hasta el día de hoy. Esto no lo inventó Bus, quien simplemente ha profundizado esta política de dominación en una forma brutal, pero el proyecto viene de muchísimos años atrás: la dominación, la anexión de América Latina a los Estados Unidos.

Este es el objetivo y para esto hay mecanismos de dominación que es la deuda externa, es el ALCA. Y hay instrumentos como el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial de Comercio para poder imponer este modelo de dominación.

El sistema imperante no desconoce la resistencia de los pueblos. Lo tiene muy claro en sus hipótesis de conflicto. Tiene muy claro cual puede ser la reacción de los pueblos, tiene muy claro lo que nosotros estamos aquí pensando y tratando de revertir. No lo ignoran. Saben la capacidad de resistencia de los pueblos, y de ahí la necesidad de imponer las bases militares norteamericanas, pero también el entrenamiento de las tropas de los ejércitos latinoamericanos bajo la hegemonía de los Estados Unidos. Hay muchos antecedentes sobre esto.

Y quiero señalar algunos de estos. Debemos hacer una breve lectura de los hechos de mediados de la década del sesenta, cuando comienza a imponerse la doctrina de la seguridad nacional en todo el continente. Vuelvo a repetir esto, más de 80,000 militares latinoamericanos fueron formados en Las Escuelas de Las Américas en Panamá para imponer las dictaduras y los sistemas de dominación. ¡Cuidado! Esto no terminó, el mismo proyecto continúa.

Ustedes saben que la doctrina de la seguridad nacional era la división del mundo de las dos grandes potencias: Estados Unidos y la Unión Soviética, a la que se le adosaba toda la llamada subversión, es decir aquello que se oponía a esta concepción capitalista neoliberal.

Y esto desarrolló un sistema represivo, en concordancia con su concepto de la guerra permanente. Hoy sentimos hablar de la guerra preventiva, acuñada por George Bush, quien decide quienes son los amigos y quienes son los enemigos. La doctrina de la seguridad nacional, y quiero leerles esto que he tratado de señalar, dice (llaman la atención los principios de base de su concepción geo-política): El individuo no existe. Los pueblos son un mito. Se desconoce la existencia del pueblo, de su identidad y de sus culturas. Lo que existe son las naciones. Fuera de la nación, la persona humana no existe. El individuo es parte de la nación, el pueblo es nación y la nación se confunde con el estado. La dialéctica que existe, así a groso modo, en toda la tradición occidental, la diferenciación del pueblo, nación y estado, es aplastada por la concepción ideológica de los militares. No hay nada que exista y que sea una realidad por encima del estado y el pueblo y la nación son mitos sin el estado. La nación por sí misma no puede nada. El estado es el poder. De allí la ecuación individuo-nación-estado-poder. La concepción ideológica no ha cambiado. Si han cambiado los ejes. Al caerse la Unión Soviética, hoy todos son subversivos y narcotraficantes. Esa es la hipótesis del conflicto.

Para las fuerzas armadas en su concepción ideológica, el enemigo no es externo, el enemigo es interno. Y vamos a ver por qué esta concepción ideológica.

Son las fronteras hacía adentro. En esta hipótesis del conflicto, y de aquí viene la instalación de las bases militares en todo el continente latinoamericano, y el incremento del control social, de los movimientos y organizaciones populares identificados como enemigos reales o potenciales.

Por eso son tres grandes ejes los que Estados Unidos ha puesto en su hipótesis del conflicto: El Plan Colombia, Puebla-Panamá, la Triple Frontera (la frontera de Argentina, Brasil y Paraguay). La base militar de Manta en el Ecuador, no estaría si el gobierno ecuatoriano le hubiese dicho no a los Estados Unidos. Pero hubo muchas presiones sobre el gobierno ecuatoriano, condicionando los créditos del fondo monetario internacional con la instalación de la base militar de Manta, que hoy es la base operativa para el Plan Colombia.

Pero también, algo que tienen que conocer es el entrenamiento de tropas latinoamericanas en distintos países. Y quiero hablar del entrenamiento de tropas latinoamericanas en la Argentina, en mi país, que no tuvieron el acuerdo del parlamento. Igual ingresaron las tropas extranjeras y tropas latinoamericanas, bajo el mando unificado de los Estados Unidos en los operativos Cabaña 2000 y 2001. Donde, en las hipótesis del conflicto se plantea claramente que, en un escenario de guerra, los enemigos son organizaciones sociales, organismos no gubernamentales y enemigos potenciales. Y esto es para toda América Latina.

Compañeras y compañeros, sobre esto tenemos que reflexionar. No basta decir ¡No a la militarización! Y que se vayan las bases norteamericanas. Tenemos que hacer un trabajo hacia lo interno de nuestro país. Nuestros parlamentos, nuestros gobernantes, ¿cómo permiten eso? Tenemos que hacer una lectura a lo interno de las hipótesis del conflicto de los ejércitos latinoamericanos ¿Cuál es el rol de las fuerzas armadas? Queremos unas fuerzas armadas al servicio de los pueblos y no contra los pueblos. Y tenemos que trabajar sobre las hipótesis de conflicto. Tenemos que trabajar realmente qué es lo que queremos de las fuerzas armadas latinoamericanas, de nuestras propias fuerzas armadas. Yo vengo de la Argentina donde las fuerzas armadas argentinas fueron de terror. Tenemos 30,000 muertos y desaparecidos por esas hipótesis de conflicto. El enemigo es interno, son nuestros pueblos.

Podemos decir sería ideal un mundo sin ejércitos, pero esto es imposible. Pero si nosotros queremos avanzar en una construcción distinta tenemos que pensar también en las fuerzas armadas y de seguridad. El rol de la policía es fundamental. La policía debe ser una fuerza al servicio de la comunidad y la han transformado en una fuerza de represión contra el pueblo. ¡Que diferencias! Y esto es una nueva concepción, una nueva concepción de sociedad. Y esto cuestiona profundamente las democracias que vivimos, democracias formales y no democracias participativas. Democracias en las que delegamos el poder en quienes después hacen lo que ellos quieren, al servicio de los grandes intereses, las corporaciones extranjeras.

Pero ¿cómo transformar esto? Es a través de potenciar el pensamiento propio, las identidades culturales, la educación, los proyectos para la vida de nuestros pueblos. El desarrollo que nos quieren imponer, es que nosotros lleguemos a ser lo mismo que el llamado, (mal llamado), primer mundo. Yo digo que no hay primero, segundo, ni tercer mundo. Es un mundo, un solo mundo mal distribuido.

Tenemos que comenzar a revitalizar los contenidos de nuestras propias culturas, de nuestra identidad y condición de ser pueblos; y la memoria de nuestros pueblos. Esto es fundamental. No podemos pensar en la paz como la ausencia de conflicto. Esto no es cierto. La paz no es la ausencia de conflicto. La paz es una dinámica permanente de vida, de relaciones humanas, de potenciar la capacidad creativa de los pueblos, cómo nos podemos respetar unos a otros en las diferencias y no en la uniformidad del pensamiento único.

La paz es tener primero una mirada hacia adentro de cada uno de nosotros. No podemos dar aquello que no tenemos. Y esa paz la podemos encontrar en la mirada hacia adentro cuando nos reconocemos en la mirada de los demás, de nuestros prójimos; que nos cuestiona, que nos interpela. Y para esto tenemos que mudar nuestras conciencias.

Y cuando hablábamos del desarrollo con unos compañeros, nos decían: El desarrollo que nos quieren imponer, es que nosotros lleguemos a ser lo mismo que el llamado, (mal llamado), primer mundo. Yo digo que no hay primero, segundo, ni tercer mundo. Es un solo mundo mal distribuido.

Y entonces me dio un ejemplo de los pueblos mayas. Los pueblos mayas, me dice, no hablan del desarrollo, hablan del equilibrio. Del equilibrio de las relaciones humanas con la naturaleza, con la vida, con las relaciones humanas. Cuando se quiebra el equilibrio viene el conflicto. ¿Cómo recuperamos nosotros el equilibrio interno en nuestro espíritu y en las relaciones con nuestros pueblos? ¿Qué estamos haciendo aquí, compañeras y compañeros? Estamos tratando de restablecer ese equilibrio de la humanidad, perdido. por este pensamiento único de la violencia sistemática, y buscando el equilibrio que nos pueda llevar a construir la paz.

Ese equilibrio es la paz. Ese equilibrio de los hermanos mayas, pero que muchas otras culturas lo tienen. ¿Cómo podemos compartir? En la resistencia cultural, en la resistencia espiritual, en la conciencia colectiva, en este intercambio maravilloso que hoy tenemos para ver por dónde podemos encontrar los caminos de un nuevo amanecer.

Un amigo africano me decía hace algún tiempo, tomando la memoria de sus antepasados, que si no sabes a dónde vas, regresa para saber de dónde vienes. ¿Sabemos nosotros de dónde venimos, qué somos? ¿Cuál es nuestra conciencia colectiva de los pueblos? ¡Cuántos interrogantes tenemos! Pero es la forma de construir. Compartiendo, construyendo. Se ha destruido mucho en el mundo. Nosotros aquí no estamos para destruir. Nosotros aquí estamos para construir, y un nuevo amanecer para todos, no para algunos.

Y creo que hoy estamos en cuestionamiento todos. Tenemos que tener una revolución de las conciencias. Porque no es sólo cambiar un modelo económico. Es una revolución de las conciencias. Es una revolución del pensamiento. Hay un quiebre profundo del pensamiento filosófico, de la ética, de los valores en este sistema de dominación y tenemos que recuperar el pensamiento propio de los valores, de la espiritualidad, de la identidad y de la memoria.

Cuando hablamos de la militarización, eso que no queremos, tenemos que pensar en lo que queremos. No quedarnos únicamente en el diagnóstico, que es bueno, es necesario, pero no es suficiente. Tenemos que construir las alternativas sociales, políticas, económicas y culturales en la vida de nuestros pueblos. Y tenemos que saber compartirlo en esa mirada hacia adentro y hacia los pueblos hermanos. Sólo así podemos cambiar esta grave situación.

En el Foro Social Mundial de Porto Alegre venimos debatiendo estas propuestas, venimos debatiendo, pero también construyendo. Y yo creo que esto que hoy se logró aquí, en este primer encuentro hemisférico se está encarando un tema que era tabú, que nadie quería tratar: el problema de las fuerzas armadas, los problemas de militarización. Hoy estamos aquí para debatirlos, pero tenemos que debatir aquí las estrategias de las fuerzas armadas al servicio de los pueblos y no como enemigas de los pueblos.

Hoy estamos aquí para debatir la nueva construcción de nuestra sociedad. Aquí hay una experiencia que marcó muchas cosas en el mundo, que es el movimiento zapatista. Y este movimiento no se limita únicamente a los reclamos al gobierno, sino a la construcción de la identidad, de los valores, a la educación, a ese respeto que le debemos lo que le llamamos nuestra madre tierra, la Pacha Mama. El respeto que le merecemos, ese equilibrio que tenemos que buscar. Y desde allí podemos llegar a que esa paz pueda ser el encuentro de la humanidad, frente al pensamiento único, a esta dominación que nos quiere aplastar y nos quiere uniformar para conseguir los recursos de nuestros pueblos.

Simplemente quiero terminar esta breve exposición, habría mucho más para compartir, o agradeciéndoles esta posibilidad de estar con ustedes. He aprendido muchísimo estos días escuchándolos. Esto nos da la fuerza, la esperanza de seguir construyendo un nuevo amanecer. Hace poco recibí una carta de otro luchador en América Latina, un obispo de Brasil Pedro, Casaldáliga; y Pedro me manda una carta circular que manda a todos los amigos, porque se va a retirar de la diócesis, está cumpliendo sus jóvenes 75 años. Me manda un proverbio sefardí que dice: "La hora más obscura es cuando comienza el amanecer". Y nosotros tenemos que apuntar a ese amanecer.

Si bajamos los brazos es porque estamos derrotados. Si nosotros tenemos ese sentido de la conciencia y vemos ese nuevo amanecer, ese nuevo amanecer que compartimos la mirada y las luchas populares, el triunfo lo vamos a lograr. Apostando a ese nuevo amanecer, a esa nueva esperanza les doy un fraterno abrazo solidario de paz y bien.

¡Y a seguir en la lucha!

 

Sesión de preguntas y respuestas

P: Háblenos de las próximas elecciones en Argentina.

R: Está muy difícil, estamos en un proceso electoral donde el día 18 de mayo va a ver un ballottage entre los dos candidatos más votados, uno es Menem, que sería una desgracia que gane, y el otro es Kirchner.

Son del mismo partido peronista, no creo que cambie mucho las cosas. Creo que va haber diferencias en la elección, una porque Menem seguro que va a abrir más las puertas a Estados Unidos con el ingreso en el ALCA, la militarización; ha hecho un desastre en el país privatizando todas las empresas nacionales . Pero también lo otro es la falta de liderazgo político, la falta de credibilidad en las dirigencias políticas del pueblo y por el otro lado hay una construcción desde lo social de nuevos espacios, que no va a ser para este acto electoral, son espacios a construir de participación social. Hay muchísima participación social, hay fábricas recuperadas, asambleas populares, están los trueques entonces esto también va a jugar un rol decisivo, e incluso el movimiento de piqueteros, en esta elección.

P: ¿Usted va a votar?

R: Voy a votar, sí. No tenemos que desperdiciar el voto, pero lamentablemente tengo que decir que no votamos lo mejor sino lo menos malo y uno no sabe hasta dónde es menos malo aquello que pensamos que es menos malo.

P: ¿Y usted cree que ese es el sentir del pueblo argentino?

R: El pueblo argentino está pasando por momentos fuertes de transformación. Un país riquísimo al que lo han saqueado sin piedad, eso lo cuestiona la democracia que vivimos, democracia representativa donde después en sus funciones de gobierno no representan al pueblo sino a los intereses económicos. Esto nos lleva a cuestionar el tipo de democracia que tenemos. Estamos en proceso de construcción de democracias participativas con control de gestión, presupuestos participativos; estamos tratando de ver la derogatoria de los mandatos a través de plebiscitos y consultas populares. La otra cosa que tratamos de ver, que no se vote más lista sábana sino la elección de diputados y senadores por distritos.

Entonces estamos redefiniendo la construcción democrática, frente a estas democracias donde se piensa que se vota y vivimos en democracia. Eso es falso. Votar no significa vivir en democracia. Democracia significa derecho e igualdad para todos, no para algunos. Cuando miramos a nuestro alrededor vemos el saqueo sin piedad que se ha hecho; el aumento de jóvenes, de niños que no tienen una esperanza de vida, del aumento del analfabetismo, de las enfermedades endémicas, la caída del presupuesto para la salud y la educación y esto tiene que ver con esto que venimos debatiendo aquí, con los problemas estructurales como es la tremenda deuda externa, que le llamo la deuda eterna. Estamos planteando también llevar la deuda externa a una consulta a la Corte Internacional de la Haya para determinar lo legítimo de lo ilegítimo, pero esto lo puede hacer un Estado. Lo otro lo que estamos planteando aquí, el rol de las fuerzas armadas y las hipótesis del conflicto y también la participación popular en los grandes problemas del país. No se puede privatizar el patrimonio del pueblo en la forma que se ha hecho y en el saqueo sin piedad de los recursos. Entonces en estos momentos estamos en pleno debate de construcción de nuevos espacios políticos sociales y culturales.

P: ¿Cuál sería su opinión de la nominación de Bush y Blair al premio Nobel de la Paz?

R: Sería una desgracia para la humanidad y esperemos que no se los den nunca. Si lo hacen yo renuncio al Premio Nobel de la Paz. También han preguntado muchas veces acerca de que Bush ora, no? ¿Y le pide a Dios?. Digo, cuando Bush está rezando, Dios se tapa los oídos, porque no quiere oír tantas mentiras y tanta hipocresía.

P: Tal vez una opinión suya sobre el papel de la ONU, también qué le espera, digamos... Muchos se preguntarán ¿Ahora qué pasa, después de la guerra con Irak qué nos espera?

Y finalmente el tema del comercio y los intereses de Estados Unidos ¿van a seguir prevaleciendo en el Medio Oriente?

R: Bueno, las primeras víctimas de la guerra contra Irak fueron Naciones Unidas y el derecho internacional, arrasados directamente, porque ahora Naciones Unidas no tiene el coraje de condenar a Bush y a Blair y también al Primer Ministro de Australia como responsable de crímenes de lesa humanidad. Si la ONU aplica esa condena a países pequeños, si hablamos del derecho y la igualdad para todos, lo debe aplicar y condenar a los países grandes. Y yo creo que eso va a ser la credibilidad de las Naciones Unidas, si la ONU tiene una razón de existir. Le mandamos una carta al Secretario General de la ONU, a Koffi Annan dónde le estoy planteando la necesidad de aplicar el derecho internacional y llevar a Bush y a sus aliados ante la Corte Penal Internacional. Todavía no tenemos respuesta.

P: ¿Cuándo la envió?

R: Bueno durante la época de la guerra y creo que si no lo hacen, son los pueblos quienes los deben juzgar.

P: Ahora los intereses de los Estados Unidos en el Medio Oriente...

R: Creo que para Estados Unidos la invasión a Irak tiene por objetivo su fortalecimiento y el control de las fuentes energéticas en Medio Oriente, pero también esto es muy preocupante para América Latina. El intento del golpe de estado en Venezuela tiene que ver también con la situación de Irak. Estados Unidos, el Departamento de Estado, está involucrado en los intentos del golpe de estado en Venezuela. Porque la militarización de América Latina también responde a la misma hegemonía mundial. Hay algunos ejes en Medio Oriente que son muy preocupantes, el problema árabe palestino- israelí, el problema palestino israelí y el control del Medio Oriente. Hay una potencia emergente cada vez con mayor fuerza, que ya está disputando mercados, que es China. Y pienso que esto se va a ir profundizando. Estados Unidos no hizo una invasión para irse, hizo una invasión para quedarse. Y hay objetivos estratégicos a largo plazo, el control de las fuentes del petróleo, no sólo ahí también en Venezuela, América Latina y entonces tendría el control internacional de los recursos energéticos.

P: Hablemos de Colombia, el presidente Álvaro Uribe ha pedido de alguna manera que Estados Unidos intervenga en su país por el asunto de la guerrilla. ¿Cuál es su opinión en ese sentido si eso logra? Tomando en cuenta que está el tema de la triple frontera, está Hugo Chávez, desde luego que los recursos naturales y todo lo que tenga que ver con la diversidad es parte del juego que también está metido en el ALCA. ¿Cuál es su opinión si realmente Estados Unidos logra intervenir en Colombia?

R: Escribí bastante sobre esto. Una de las cosas que nosotros tenemos como análisis de esa situación es que Estados Unidos va a profundizar su hegemonía continental. Una es el ALCA, otra es la deuda, y la militarización de América Latina. Un tema central de este encuentro, el Primer Encuentro Hemisférico sobre la militarización. Hay ya un avance de intervención en el Ecuador y el pedido de Uribe del ingreso de tropas, ya hay asesores militares norteamericanos en la región, pero también el entrenamiento de tropas latinoamericanas para usarlas en el plan Colombia, esto sería práctico porque sería otro Vietnam en América Latina, con consecuencias imprevisibles. Y las bases militares tiene por objetivo el control social. Insisto, esto puede llevar a situaciones imprevisibles.

P: Cuál es su opinión sobre el conflicto en Chiapas, la cuestión de la militarización en Chiapas, el conflicto no resuelto, el surgimiento de municipios autónomos... Todos estos eventos... ¿Qué piensa usted de la situación en Chiapas?

R: Hay cosas muy atípicas en el contexto latinoamericano: el caso de Chiapas, el movimiento Zapatista, y esto es que el movimiento Zapatista no quiere tomar el poder. No es como otros movimientos, como el caso de los movimientos insurgentes en Colombia. Lo que busca es el respeto, las autonomías, el respeto regional a las identidades, a las culturas y el gobierno mexicano debe ser respetuoso de los Acuerdos de San Andrés que todavía no se han puesto en vigencia en su totalidad. Y la militarización que se ha hecho de la región, ¿las fuerzas armadas al servicio de quién deben estar? Deben estar al servicio del pueblo y no en contra del pueblo. El respeto de las autonomías, debe respetarse de acuerdo a lo que fue San Andrés. Son procesos, hay que insistir en que el gobierno mexicano debe ser respetuoso de esos acuerdos.

P: ¿Qué propuesta daría para que la militarización fuera a favor del pueblo, de los pueblos?

R: Hay que cambiar el rol de las fuerzas armadas. La mayoría de todas las fuerzas armadas latinoamericanas, salvo ahora Venezuela o Cuba, están manejadas y supeditadas a las políticas de Estados Unidos para el continente. Hay que cambiar las hipótesis del conflicto. Las fuerzas armadas tienen como hipótesis del conflicto: el conflicto interno. El enemigo es el pueblo, hay documentos oficiales en donde se señala que los enemigos son las organizaciones sociales, los organismos no gubernamentales y los enemigos potenciales, que podemos ser cualquiera, son aquellos que se oponen. Es la misma doctrina de la seguridad nacional donde cambiaron sus jefes pero sigue vigente.

P: ¿Cuál es su punto de vista con relación a que Estados Unidos viene contratando, viene enrolando a jóvenes mexicanos para la armada de su país?

R: Ustedes saben que en la guerra contra Irak fueron 40.000 latinos como tropas y la gran mayoría son de aquí, como lo fue en la guerra de Vietnam donde la mayoría eran negros. Entonces esta es una política que se impone: que no le genere el conflicto interno y que los muertos no sean los norteamericanos. Es lo mismo si hay conflicto en América Latina. ¿Porqué Estados Unidos está preparando a los ejércitos latinoamericanos para preservar sus intereses? En la Escuela de las Américas en Panamá, más de 80.000 militares latinoamericanos fueron entrenados, que fueron los que impusieron la dictadura. En esa hipótesis de conflicto que hoy expliqué, también va a utilizar los ejércitos latinoamericanos para defender sus intereses y su hegemonía continental.

No hay una conciencia nacional y no hay una conciencia de la soberanía de los pueblos en los ejércitos latinoamericanos, por eso hoy decía que una cosa es la militarización y otra ¿qué hacer con las fuerzas armadas latinoamericanas? ¿Cuáles son las hipótesis del conflicto? Pregunten ustedes a los ministros de defensa y a los gobiernos cuáles son las hipótesis del conflicto de sus ejércitos. Y ahí lo van a ver con claridad.

P: ¿Usted considera que EUA podría intervenir en Cuba y sobre todo, una opinión sobre lo que pasó recientemente: los fusilamientos de los cubanos?

R: Bueno acabo de sacar un artículo que publicó La Jornada sobre los derechos humanos en Cuba y en los EUA. Ustedes saben que Bush firmó siendo embajador de Texas más de 150 condenas a muerte, nadie dijo nada. La legislación, la constitución de Estados Unidos, la Constitución de Cuba tienen dentro de sus leyes la aplicación de la pena de muerte. Cuba lo que hizo es aplicar la pena de muerte a actos terroristas como es el secuestro de aviones y embarcaciones. Estados Unidos hubiese hecho lo mismo o peor. Pero nadie habla de los talibanes, que tiene EUA en la base de Guantánamo. ¡Cuidado! Esto no justifica ninguna de las dos cosas. Yo estoy en contra de la pena de muerte en cualquier parte del mundo: en Cuba, en EUA, en Nigeria, en cualquier parte, pero lógicamente cuando Cuba hace algo, EUA enseguida lo manipula para condenar a Cuba y seguir con el bloqueo de más de 40 años. Entonces creo que hay que tener claridad. Yo estoy reclamando al gobierno cubano la abolición de la pena de muerte, pero se la estoy reclamando tambien a los EUA. O en el Senegal. O en Nigeria. En cualquier país del mundo. Queremos la abolición total y absoluta de la pena de muerte en el mundo. Cuando el estado aplica la pena de muerte, el estado se vuelve asesino. Entonces tengamos claridad en esto. ¿Cuál es la manipulación de los medios para condenar a Cuba pero no para condenar a EUA? Observen ustedes que la ONU no ha condenado la invasión de Estados Unidos a Irak. Entonces ¿de qué estamos hablando? Creo que en esto debemos tener mucha claridad de qué es la defensa de la vida, qué es la defensa de los DDHH, cuál es la construcción democrática que tenemos y esto lo tenemos que denunciar en cualquier parte del mundo. Pero también lo que yo señalo es que tenemos que seguir apoyando al pueblo cubano, no dejarlo solo. Eso que hoy señalaba del pensamiento único, las cosas no son blanco y negro, las cosas tienen muchos matices intermedios, entonces así como condenamos la pena de muerte, también tenemos que seguir siendo solidarios con el pueblo Cubano. Y defender el derecho de la autodeterminación de los pueblos y no el sometimiento a las imposiciones de un imperio.

P: Tendría usted alguna opinión sobre el papel o el desempeño del gobierno de México sobre toda esta situación de Irak, esa ambigüedad que a mostrado de no apoyar la guerra, pero tampoco apoyar la resolución para condenar a EUA o los crímenes de guerra de EUA, saboteo contra Cuba. Esa ambigüedad del gobierno Mexicano en la ONU y fuera de la ONU...

R: Es lo que hablé del pensamiento único que se maneja con el pensamiento ajeno y no con el pensamiento propio. No tienen políticas propias, no tienen ideas propias. Einstein decía que el gran desafío que tenemos que es más importante que el conocimiento, es la creatividad. No tienen creatividad y además están sometidos por el miedo a las sanciones económicas. Observen ustedes que EUA está amenazando a Francia porque Francia se opuso a la guerra. Entonces ahora quieren sancionar a Francia económicamente. Son estas las locuras de un imperio que quiere someter al resto del mundo al pensamiento único. Lo que pasa con el gobierno mexicano, lo que uno le tiene que reclamar es la claridad en sus decisiones y que tenga coraje, que no tenga miedo, que tenga coraje.

P: ¿ Hasta que punto Europa puede erigirse en la alternativa...

R: Yo creo que Europa tiene que ser una alternativa, esto es fundamental. Tiene que ser una alternativa, porque la única forma de contrarrestar, porque... ¡Cuidado! todo este mecanismo que EUA está imponiendo es para dominar a Europa y para dominar a China. Europa va a terminar siendo la enemiga de los EUA. Si entra el ALCA en América Latina el comercio de Europa va a ser controlado por los EUA. Si controla la fuente del petróleo, de energéticos, Europa va ser dominada por los EUA y Europa de una vez por toda tiene que tener pensamiento propio, tiene toda una historia Europa, y tiene que tener ese coraje. Y yo vi con mucha esperanza que Francia y Alemania le hagan frente y que actualmente estén pensando en las alternativas porque saben que si no lo hacen, Europa va a ser dominada. El caso Aznar, en España que dejó a Europa y buscó la alianza con EUA, fue un repudio total del pueblo español y del mundo. Entonces creo que aquí hay una potencialidad de los pueblos, el 15 de febrero fue una luz de esperanza para el mundo, donde los pueblos se pusieron de pié y dijeron ¡basta! Lógicamente el imperio no se escucha más que así mismo y no quiso escuchar el clamor del mundo, pero cuidado, lo hizo porque el imperio tiene miedo y yo creo que cuando el imperio tiene miedo va a su destrucción. Hay un hecho que es muy importante que lo tengan en cuenta, hace más de cien años Lincoln tuvo una voz profética sobre eso, dijo: La destrucción de los Estados Unidos no va a venir de afuera, la destrucción de Estados Unidos va a ser desde adentro, va a ser una autodestrucción porque no supimos, o no van a saber, construir relaciones internacionales justas. Esto lo recoge Kennedy, les doy el dato, en el discurso que da en las Naciones Unidas en el año 61 retomando la voz de Lincoln hace más de 100 años y yo creo que hay que estar atentos a esta situación.

P: Pero Europa quedó políticamente dividida después de la guerra de Irak, ¿verdad?

R: No sé, creo que hubo un Berlusconi que al final tuvo que dar marcha atrás y callarse, un Aznar donde el mismo pueblo español le dijo que ¡no! Un Blair al que el mismo pueblo británico le dijo no, dentro de los EUA hay una gran movilización, hay en muchos estados, esto no se publica. La desobediencia civil, como lo hizo Luther King, la resistencia social, han comenzado ahora a perseguirlos dentro de los EUA incluso el control de los libros que leen, a dónde van, qué hacen. Prohíben que los norteamericanos viajen a Cuba. ¿Es eso democracia o es una democradura? Entonces tenemos que comenzar a repensar todo, hoy es el gran desafío, es volver a pensar las democracias que vivimos, volver a pensar en recomponer el pensamiento, el pensamiento de los pueblos, el pensamiento filosófico, los valores, la ética. Han vaciado de contenido los valores, han vaciado la palabra: la guerra contra Irak es para defender la democracia y defender la libertad. Han terminado masacrando al pueblo iraquí. Yo estuve doce días en Irak, lo que sí les puedo decir así muy brevemente es una cosa vivida en Irak, tremenda. Hace más de un año que estuve en Irak. Me hizo recordar Hiroshima, estuvimos en Japón en Hiroshima y hablamos con los sobrevivientes de Hiroshima. En el museo de Hiroshima hay una piedra. Cuando cae la bomba atómica la gente se desintegra pero en la piedra quedó grabado como el negativo de una persona, escribí mucho sobre eso, un diálogo de la sombra y la piedra. Y cuando estuve en Irak vi lo mismo, ustedes recordarán que la CNN decía que dos bombas inteligentes, porque ahora las bombas piensan ¿no? habían entrado por el tubo de ventilación de un bunker militar y lo había destrozado. Eso lo pregonaron y era como el gran éxito, donde no se veían los muertos. Cuando llegamos a Bagdad después de hacer mil kilómetros desde Amán, Jordanía, a Bagdad, lo primero que hicimos: dejar las cosas en el hotel e irnos a ese lugar, a ese bunker. Ese era un refugio de niños, ahí mataron 600 niños con sus madres, nos recibió una mujer que vive en un carromato frente a ese refugio de niños, donde ahora es un santuario. Hay flores allí, el recuerdo de los niños, fotografías, juguetes, pertenencias de los niños, pero pude ver en la pared lo mismo que en Hiroshima, dos siluetas de mujer, como negativo, una mujer está abrazada a su niño, se ve la cabecita del bebé y al lado una mujer de perfil, que estaban hablando cuando caen las bomba, esas dos bombas inteligentes que matan a esos niños. Y esa mujer está ahí como testimonio del horror, ella se salvó porque fue a lavar la ropa y cuando regresó su familia ya no estaba. Esos son los horrores de la guerra y esa es la manipulación de los grandes medios de comunicación, porque aquí no son solo las tropas, hay cómplices que son los grandes medios de comunicación que han avalado, han hecho un lavado cerebral a la gente para querer mostrar las atrocidades de una guerra casi como si fuera una película de Hollywood. Entonces por esto tenemos que denunciar las atrocidades de la guerra, tenemos que denunciar el desprecio de la vida. Por eso hoy a comencé con ese cuento de García Márquez: el ser el humano, la persona humana, cuando perdemos esto de vista... El pensamiento sin sentimiento es la gran tragedia en la vida y todo lo que se hecho aquí es el pensamiento sin sentimiento, donde el ser humano está ausente, donde los pueblos están ausentes, donde se privilegia lo económico, es decir la riqueza. Observen ustedes que en la guerra de Irak, las empresas, antes de llegar a Bagdad ya se habían repartido los despojos del pueblo Iraquí. ¿Quiénes son los beneficiados? Son como buitres que están tratando de apropiarse de lo que no les pertenece.

P: ¿Qué opina del tratado que firmaron con Bush?

R: Es apropiarse de lo que no les pertenece, de ahí el problema éste de la invasión, donde los valores, donde el sentido de la vida no cuenta, cuenta la especulación financiera, cuentan los recursos.Yo recuerdo que estando en España el hermano de Bush fue a visitar a Aznar y fue terrible porque lo primero que dijo fue: "Vengo a visitar aquí a nuestro amigo el presidente de la República de España". Lo primero que dijo: "el Presidente de la República de España" y uno se quedaba así ¿no?, y entonces dice: Ustedes no se imaginan, no se imaginan los beneficios que nos va a dar esta guerra Y lo dijo así con total y absoluta crueldad. ¿Cuáles son los beneficios? En esto ¿el ser humano dónde queda? ¿Dónde quedan los niños de Irak? ¿Dónde quedan las mujeres de Irak? ¿Dónde queda el pueblo de Irak? Lamentablemente en ese horror de la muerte de tanta gente, de los periodistas, murió un gran amigo mío, Mario Podestá, en la carretera a Bagdad, con otra periodista argentina, Verónica Cabrera. Antes de viajar aquí a Chiapas, el mismo día que viajaba aquí a Chiapas, llegaban los cuerpos de estos periodistas, de corresponsales de guerra a Buenos Aires.