Familias Desalojadas de la Comunidad Lucio Cabañas (Arroyo San Pablo) de Montes Azules

A LA PRENSA NACIONAL E INTERNACIONAL.
A LOS ORGANISMOS DE DERECHOS HUMANOS.
A LAS ORGANIZACIONES SOCIALES INDEPENDIENTES.
A LAS COMUNIDADES INDIGENAS AMENAZADAS DE SER DESALOJADAS DE LOS MONTES AZULES.

A seis meses de que el gobierno federal nos desalojó de nuestra comunidad en Montes Azules, sitio al que nos vimos obligados a migrar por la violencia impune que nos desplazó de nuestro hogar dos años antes, las familias indígenas afectadas tenemos completamente claro que esta situación no es de "reubicación", como lo aseguran las autoridades, sino de simple desalojo.

Por eso hemos tomado la determinación política de rechazar todo diálogo o "negociación" con la Profepa y demás autoridades gubernamentales, luego del último de un sinnúmero de engaños en el sentido de dotarnos de un predio, mientras sólo nos mantenían como presos en un albergue de Comitán y viviendo de sus migajas. Así mismo, les advertimos que no vamos a aceptar ninguna de sus limosnas en forma de despensas: ni con su azúcar, ni con su maseca, ni con su arroz, van a comprar nuestra conciencia y dignidad. Ya no insistan.

Exigimos a los gobiernos federal y estatal, que RESPETEN nuestra decisión autónoma y cesen de hostigarnos e intimidarnos con la presencia constante de hasta siete u ocho de sus vehículos, en el poblado donde ahora nos encontramos refugiados en la región Marqués de Comillas. A Pablo Salazar Mendiguchía, le reclamamos que gire instrucciones precisas a su delegado de gobierno en la región, Gabriel Montoya Oceguera, para que se desista de presionarnos con el fin de que le firmemos ciertos documentos que no entendemos y que parecen ser una nueva trampa. Y a los empleados de la Profepa y policías que los acompañan, que desistan de su intención de comprar nuestra conciencia con cerveza, como lo han intentado en los últimos días. Nosotros no bebemos.

Responsabilizamos a los gobiernos federal y estatal en general, y a la Profepa, Semarnat y Sedesol en particular, de cualquier represión o agresión física, moral y psicológica, que suframos como consecuencia de la determinación politica antes expresada.

Somos el primer ejemplo para las más de 40 comunidades que están amenazadas de desalojo en la región, por parte de la Profepa y otras dependencias oficiales, así como por indígenas lacandones y otros de la zona que el gobierno comienza a perfilar como auténticos paramilitares; que además están siendo utilizados para limpiarle el terreno a las transnacionales que lucran con la biodiversidad. Que quede claro: los gobiernos federal y estatal no están dispuestos a dotarnos de tierras en otro lugar. No piensan reubicarnos, sino expulsarnos. Si en seis meses y bajo una fuerte presión política, no pudieron colocarnos a cinco familias (29 personas), es imposible pensar que querrán reubicar a cientos de familias que hoy habitan los Montes Azules.

Por ultimo hacemos del conocimiento público que: vista la nula voluntad política gubernamental para reubicarnos; luego de haber sido desplazados de tres diferentes comunidades en los últimos dos años, por la falta de acción de la mal llamada justiciamexicana; y no contando con el dinero necesario para comprar tierra; el gobierno no nos deja otro camino que regresar a Montes Azules en cuanto lo juzguemos conveniente. Allá volveremos.

¡¡¡LA SELVA ES TERRITORIO INDIGENA ANCESTRAL,
NO BOTIN DE TRANSNACIONALES!!!

¡¡¡ EXIGIMOS CUMPLIMIENTO CABAL A LOS ACUERDOS DE SAN ANDRES !!!

¡¡¡ NO AL AREA DE LIBRE COMERCIO DE LAS AMERICAS !!!

¡¡¡ NO AL PLAN PUEBLA-PANAMA !!!

Familias Desalojadas de la Comunidad Lucio Cabañas
(Arroyo San Pablo) de Montes Azules,
Coordinadoras Regionales de la Sociedad Civil en Resistencia de
Marqués de Comillas, Los Altos, Fronteriza y Norte-Selva